POR GEORGINA STICCO, CO FUNDADORA DE GROW, GÉNERO Y TRABAJO – Entre todas las enseñanzas que nos deja el coronavirus, una de la que esperamos no olvidarnos es que el género es una variable transversal a todas las dimensiones de esta crisis. Para generar estrategias apropiadas y efectivas para todos y todas en salud, transporte, cuidado o trabajo, debe incluirse el enfoque de género.
A continuación, proponemos algunos unos ejes de análisis sobre esta temática.
¿Se enferman más los varones?
Las cifras preliminares muestran que las mujeres y los varones están siendo infectados por el coronavirus en aproximadamente el mismo número, pero en algunos países la tasa de mortalidad es notablemente mayor para los varones que para las mujeres[1]. Contar con sistemas de salud que desagreguen la información por sexo es de vital importancia para analizar las razones detrás de estas diferencias.
Tabla 1- Comparación de casos presentados versus mortalidad
Cada 10 infectadas mujeres se han presentado: ● Italia: 10 de varones ● Alemania: 9 ● Argentina: 10 ● China: 10 ● España: 13 ● México: 14 | Cada 10 muertes de mujeres se han presentado: ● Italia: 17 de varones ● Alemania: 13 ● Argentina: 19 ● China: 18 ● España: 14 ● México: 21 |
Fuente: Data recolectada por Global Health 50/50, del 23 al 28 de abril 2020[2].
En relación a las personas infectadas notamos cambios a medida que avanza la pandemia en los países: al comienzo es más alta la tasa de varones infectados que de mujeres, pero a medida que avanza, se van igualando. Una hipótesis es que los primeros que se enfermaron en cada país son personas que estaban de viaje, sea por negocios o placer, y en su mayoría eran varones (porque el techo de cristal es un fenómeno universal).
Luego, con el avance del brote, quiénes se ponen en mayor riesgo es el personal de salud, que a nivel mundial, al igual que en nuestro país, está feminizado. Esta sería una clave para entender cómo en Italia, Alemania o incluso en Argentina, al 20 de marzo cada 10 mujeres infectadas había alrededor de 14 varones, y un mes después la relación se igualó.
En cuanto a la mortalidad, se considera que las condiciones físicas previas de las personas impactan en las posibilidades de recuperación. Comportamientos como fumar o consumir alcohol en exceso, por su relación con las enfermedades cardíacas, son de los principales factores reconocidos para estar en una situación de vulnerabilidad en relación al COVID 19, y ambas costumbres tienen una marcada diferencia de género.
Mientras que en el mundo el 36% de los varones y el 7% de las mujeres fuman, en Argentina lo hacen el 26% de los varones y el 18% de las mujeres, según la 4° Encuesta Nacional de Factores de Riesgo (ENFR, 2018). En proporción, de las personas que fuman el 57% son varones y el 43% mujeres. Además, según ENFR, el 10,8% de los varones argentinos versus el 6,3% de las mujeres muestran un consumo de alcohol regular de riesgo[3].
¿Quiénes se exponen más?
Argentina es uno de los países que utilizó como estrategia para disminuir el riesgo de contagio el aislamiento social preventivo y obligatorio, exceptuando algunas actividades laborales, consideradas esenciales.
Si bien un 25% de estas actividades son realizadas por mujeres, los trabajos más expuestos son aquellos relacionados a la salud, porque deben estar en contacto directo con las personas enfermas. En este rubro, el 71% son mujeres. Además, agrupa al 52% de las mujeres que deben salir a trabajar.
Otra actividad que también podría implicar estar en contacto con personas enfermas, pero en menor medida, es el transporte, altamente masculinizado. Ambos rubros deben contar con los elementos necesarios para su protección, pero además se debe considerar qué sucede en sus hogares y qué estrategias son necesarias desde las instituciones empleadoras para garantizar que puedan trabajar con tranquilidad. Abordaremos el tema del cuidado más adelante.
¿Quiénes viajan con mayor seguridad?
Las mujeres son las que más usan el transporte público, dado que tienen menos acceso a autos. A nivel nacional y en la CABA, alrededor del 70% de las licencias de conducir que se emiten son requeridas por varones y el 30% por mujeres[4]. En este contexto de aislamiento social, las mujeres dependen mucho más del transporte público que los varones para ir al trabajo, visitar a un familiar a su cargo o hacer las compras, lo que las expone a un mayor riesgo de entrar en contacto con el virus.
En ciudades donde se redujo la frecuencia de los viajes, como una manera de desalentar que la gente se traslade, se extendió la espera y en muchos casos aumentó la imprevisibilidad sobre cuánto tiempo adicional hay que considerar para llegar al trabajo, realizar una visita a un médico o hacer las compras. Además del tiempo hay que considerar si el transporte en sí cumple con las regulaciones necesarias para sostener la distancia social preventiva.
¿Quiénes tienen más posibilidades de sostener su trabajo?
Al menos el 30% de las mujeres se encuentra en áreas de comercio (por menor y mayor), hotelería y turismo, que forman parte de los sectores más afectados por las medidas de aislamiento. Esto sin considerar el impacto en las trabajadoras informales, que son el 47% de las mujeres ocupadas.
Además de la posibilidad de perder el trabajo está la carga de cuidado que aumentó con el cierre de las escuelas. Incluso sin una crisis, las responsabilidades de cuidado generalmente recaen en las mujeres. Mientras que el 83% de las mujeres con hijos/as realiza tareas de cuidado, solo el 13% los varones realizan estas tareas (ENES, 2015)[5].
Según la encuesta que realizamos desde Grow sobre el Uso del tiempo (disponible para completar acá) mientras que en promedio las mujeres le dedican alrededor de 10,5 hs a las tareas de cuidado, los varones les dedican 7 hs. Y estas actividades hay que conciliarlas con trabajar, dormir y si es posible tener tiempo de ocio. En este sentido observamos además que los varones usan 1 hs más que las mujeres para dormir, 1,5 hs más para el trabajo remunerado y 1 hs más para actividades relacionadas al ocio y el entretenimiento.
¿Dónde están las mujeres que toman las decisiones?
Mientras que las mujeres sostienen el sistema de salud y las tareas de cuidado, en su mayoría observamos que son los varones los que elaboran las estrategias ante la pandemia.
Según el informe «Poder, privilegios y prioridades» de Global Health 50/50 (GH5050) en los países de ingresos bajos y medianos las mujeres representan sólo el 5% de los líderes de las organizaciones mundiales de salud, mientras que más del 70% de los directores ejecutivos y los presidentes de los consejos de salud en todo el mundo son varones. Contando además a los representantes políticos, tenemos un grupo que al analizar las estrategias para abordar la pandemia no logra incluir las necesidades de un gran porcentaje de la población, y solo propone soluciones después de observar el impacto de las medidas tomadas.
Mientras no estemos sentadas de manera representativa y con voz en las mesas de decisión, una parte importante de las estrategias seguirán sin ser inclusivas.
[1] The Lancet (2019): COVID-19: the gendered impacts of the outbreak.
[2] CNN Health (2019): Here’s why the coronavirus may be killing more men than women. The US should take note.
[3] El ENFR lo define como el consumo de más de 1 trago promedio por día en mujeres y 2 tragos promedio por día en hombres en los últimos 30 días.
[4] Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV, 2019).
[5] El impacto del cuidado en el trabajo (Grow, 2019).