(Por Marina Wertheimer). El intendente Gabriel Katopodis y el ministro de Ciencia y Tecnología, Lino Barañao, firmaron un convenio que busca promover la innovación tecnológica en el partido. Fue en el marco de la Jornada Políticas e Instrumentos Vigentes para PYMES, que se llevó a cabo a fines de marzo. La medida apunta a fomentar un polo de desarrollo económico a escala regional.
En 1988, San Martín fue declarado “capital de la industria” por ser la segunda fuerza industrial del país. Hoy, más de veinte años después, hace honor a su apodo y redobla la apuesta. Con el convenio firmado por el intendente Gabriel Katopodis y el ministro de Ciencia y Tecnología Lino Barañao a fines de marzo, queda consolidado el plan que busca fomentar el desarrollo tecnológico en las industrias del distrito. Se trata de un Convenio Macro entre el municipio y la Nación para impulsar la competitividad y la innovación tecnológica. La firma se hizo dentro de la jornada “Políticas e Instrumentos Vigentes para PYMES”, que organizó la Secretaría de la Producción y Desarrollo Económico de la Municipalidad y la Agencia de Desarrollo Local de San Martín (ADELSAM), con la consigna «Desarrollar la producción local es crear empleo genuino».
Más de 300 empresas asistieron a la presentación de los programas oficiales que darán respaldo financiero a la competitividad y la innovación tecnológica a pequeñas y medianas industrias. Estos programas dependen del Ministerio de Industria de la Nación (SEPYME), del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Tecnológica y de la Comisión de Investigaciones Científicas (CIC) de la provincia de Buenos Aires.
El evento contó con un módulo dedicado a la exposición de las políticas que desarrolla el Municipio en materia de provisión de instrumentos para el desarrollo económico y estuvo a cargo del secretario de Producción y Desarrollo Económico de San Martín, Alfredo Buglioni, junto a representantes de las empresas del partido. La segunda parte quedó a cargo del titular del CIC, Carlos Gianella, quien habló sobre las herramientas para la mejora competitiva y la innovación en las PYME. También participaron representantes en la materia de la provincia de Buenos Aires y el director del Fondo Tecnológico Argentino (FONTAR). Luego de las disertaciones, se dio lugar a la firma de convenio.
“San Martín es un símil Silicon Valley y hay que aprovechar eso. El Ministerio está dispuesto a cooperar, porque si no se da en San Martín no se da en ningún lugar”, afirmó el ministro Barañao en alusión al valle de California que nuclea industrias de Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC). Y agregó “La ciudad de San Martín está estratégicamente ubicada, tiene una de las universidades más importantes del país, tiene centros de investigación como la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) y, muy cerca, la Facultad de Ciencias Exactas. Esto la ubica en una posición privilegiada para poder captar conocimiento y convertirlo en un incremento de la productividad y la competitividad de las empresas, que garantice puestos de trabajo y genere inclusión social”.
La promoción al sector estará dada por programas de modernización tecnológica (PMT) para PYMEs; programas para incubadoras de empresas con miras a un desarrollo local sostenible; el acceso al crédito a través de “programas sostenibles”; y planes de financiamiento con garantía definida por el BCRA para capital de trabajo, prefinanciación de exportaciones, compras de bienes de capital y contratación de servicios.
En la reunión, el intendente Katopodis afirmó: “Estamos convencidos que San Martín tiene que iniciar un proceso de apuesta a la producción y al desarrollo industrial. Hoy tenemos el desafío de convertir a nuestra ciudad en el corazón del conocimiento y llevarla a los niveles de competitividad que la realidad mundial y regional nos propone”.
San Martín, termómetro de la economía
A fines de la década de 1980, General San Martín representaba la segunda fuerza industrial de la provincia de Buenos Aires y del país, y era la primera concentración argentina de la Pequeña y Mediana Empresa, responsable del 3% del PBII (Producto Bruto Interno Industrial) nacional. Esto le valió que en 1988 el Concejo Deliberante declarara al municipio “Capital de la Industria”. Sin embargo, los años se encargarían de socavar el prestigio ganado.
El proceso de desindustrialización que avanzaba a un ritmo galopante en el país durante los ‘90 hizo que el perfil industrial de San Martín fuera dando lugar a un escenario dominado por fábricas abandonadas o reconvertidas en supermercados, centros deportivos, depósitos y otros establecimientos orientados al rubro de comercio y servicios. Según indica la Fundación Observatorio PYME, la pérdida de establecimientos industriales en el partido fue superior al del resto de la Provincia: “Todo esto generó que San Martín perdiera importancia relativa tanto a nivel provincial como en el Conurbano”, afirman desde la entidad.
Pero con la recuperación económica, vino también un rápido crecimiento para el municipio, lo que puede notarse muy bien en el nivel de empleo: del Censo Industrial de San Martín, relevado en 2005, surge que la ocupación industrial local creció un 35% entre el 2003 y 2005, duplicando al registrado a nivel nacional.
Los años pasaron, y actualmente San Martín contribuye a la generación del 5 % del PBI nacional y al 12 % del producto bruto provincial. Además, puertas adentro, cerca del 80% de los ingresos del partido son generados por la industria, con una particularidad: la gran mayoría de las empresas del distrito son PyME.
El Ministerio de la Producción, Ciencia y Tecnología bonaerense define como agrupamientos industriales a “los espacios físicos especialmente desarrollados para la instalación de industrias, actividades productivas y de servicios que cuentan con infraestructura y equipamientos, y optimizan la radicación y organización territorial de las actividades productivas”. Dentro del área metropolitana, encontramos agrupamientos industriales importantes en Malvinas Argentinas, Morón, La Matanza, Ezeiza, Lanús, Almirante Brown, Berazategui y, por supuesto, San Martín. En Campana, Escobar, Moreno y Pilar se ubican los parques industriales de mayor envergadura.
También se destacan los distritos productivos, es decir, aglomeraciones de PYMES espacialmente concentradas. En la región no son muchos los distritos de esta escala y sobresale el metalmecánico en Campana. Dentro de la Ciudad de Buenos Aires el agrupamiento en distritos se vuelve más fuerte, con localizaciones de TICs al sur de la ciudad.
La aglomeración ofrece ventajas competitivas porque aporta flexibilidad a la estructura productiva y aumenta la capacidad tecnológica e innovadora de las empresas, facilitando el intercambio de competencias tecnológicas, organizacionales y de comercialización, indican desde el ministerio bonaerense. De ahí la importancia de fomentar los polos de desarrollo económico en la región.
En este sentido, el convenio firmado en San Martín contribuye al desarrollo de la Gran Buenos Aires a través la modernización y diversificación de su tejido económico. Incorporar de manera sistémica una visión competitiva basada en la idea de integración de distritos tecnológicos representa un gran aporte en esa dirección, y forma parte de la agenda para el desarrollo metropolitano.