(por Elisabet Contrera). El trágico temporal que azotó a la región metropolitana el 4 de abril pasado dejó como consecuencia 18 víctimas fatales, a miles de personas sin luz y a cientos de familias sin vivienda. También puso a prueba la capacidad del Estado para hacer frente a la crisis y reveló las falencias de las empresas concesionarias del servicio eléctrico.
El oeste y el sur del conurbano bonaerense fueron los más castigados por el temporal que incluyó vientos de 110 kilómetros por hora. La tormenta se desató en la víspera de Semana Santa, durante el atardecer del miércoles 4 de abril. Unos 14 mil postes fueron derrumbados por el efecto del viento, lo que provocó que 30 mil usuarios se quedaran sin energía eléctrica. Cientos de árboles cayeron sobre techos de casas y colegios del conurbano.
Frente a este estado de crisis, la respuesta del Estado nacional fue rápida. Creó un comité de emergencia coordinado en forma conjunta por los ministerios de Desarrollo Social y de Planificación Federal. Alicia Kirchner, a cargo de la cartera social, recorrió las zonas de desastre y envió a un grupo de 500 profesionales para relevar las necesidades de la población.
Más de 4.500 efectivos de las fuerzas nacionales de seguridad fueron designados para brindar ayuda. El Gobierno bonaerense actuó en la misma línea y declaró la emergencia en las áreas de Educación, Desarrollo Social y Espacio Público con el objetivo de facilitar las acciones.
La reacción del Gobierno porteño fue distinta. Además de trascender a través de los medios que los funcionarios de las áreas comprometidas estuvieron fuera del país, una comitiva judicial, encabezada por la jueza Elena Liberatori, comprobó que hubo “ineficiencia” y “clientelismo” en la ayuda a las villas y asentamientos afectados.
“Todavía hay familias que están en situación de peligro”, alertó Daniela Lovisolo, a cargo del Programa de Acción Legal Comunitaria de la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ). La organización cuenta con un centro de atención y orientación legal gratuita con base en el distrito bonaerense de Moreno. “Hay viviendas precarias sin techos o con árboles encima”, explicó. El centro seguirá brindando apoyo legal a las personas afectadas. Pueden solicitar entrevista al teléfono 15- 5807- 3585 o al email asistencialegal@acij.org.ar.
Por su parte, tanto el Estado nacional como el provincial tomaron algunas medidas para ayudar a las familias damnificadas. El gobernador bonaerense, Daniel Scioli, anunció la creación de un fondo de 100 millones de pesos para las zonas afectadas por el temporal.
También pondrá en marcha un plan de reforestación provincial. “Estamos encarando este plan para contrarrestar los efectos del cambio climático; con el Banco Provincia tenemos una línea especial de créditos para las empresas; y la Secretaría de Deportes está trabajando para recuperar los clubes de barrio afectados”, remarcó el gobernador en declaraciones a la prensa.
La Cámara de Diputados bonaerense aprobó un proyecto de ley por el cual se declara zona de desastre y en estado de emergencia social, económica, sanitaria y urbana a los municipios afectados y permite una exención impositiva a los damnificados. Se trata de una iniciativa presentada por el presidente de la Cámara, Horacio González, que exime del pago de las cuotas del impuesto inmobiliario a los particulares damnificados, cuyas propiedades no superen la valuación fiscal de 200 mil pesos.
El Banco Provincia otorgará una línea de créditos hipotecarios de hasta 200 mil pesos, a 20 años, y con una tasa del 9,9%; y otros préstamos personales, con la misma tasa de hasta 50 mil pesos destinado a reparaciones menores, con un plazo de 72 meses.
El ministro de Agricultura de la Nación, Norberto Yauhar, decidió transferir a la Provincia recursos del Fondo de Emergencia Agropecuaria para asistir a los 200 productores hortícolas de Florencia Varela, severamente afectados por la tormenta.
Por su parte, el Ministerio de Desarrollo Económico porteño, por medio de la Subsecretaría de Deportes, otorgará subsidios a los clubes barriales que fueron afectados por el temporal. Las instituciones barriales que recibirán ayuda son Glorias Argentinas, José Hernández, Brisas del Sud, DAOM, Albariño, Alvear, Argentino, Deportivo Riestra y Barracas Central, la mayoría del sur y del oeste.
Además de los destrozos ocasionados, el temporal puso en el ojo de la tormenta a las empresas concesionarias de electricidad. Funcionarios nacionales, intendentes y vecinos lazaron críticas y reclamos hacia las firmas por las graves demoras en el restablecimiento del servicio.
El presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, Horacio González, se manifestó «indignado» ante la falta de respuestas de las empresas. “Estoy indignado. Es vergonzoso que tanta gente aún permanezca sin servicio eléctrico en sus domicilios y que las industrias y comercios no puedan trabajar por responsabilidades ajenas”, declaró. “Si bien se trató de un fenómeno climático de excepciones no se puede tolerar semejante falta de soluciones a nuestros vecinos”, sostuvo.
A su turno, el subsecretario de Coordinación del Ministerio de Planificación, Roberto Baratta, pidió a las empresas concesionarias “que actúen en forma inmediata para reponer el servicio lo antes posible”. Durante una recorrida por las zonas afectadas, adelantó que “una vez que se vean los resultados, haremos las evaluaciones correspondientes a las empresas y si hay que aplicar sanciones, lo haremos”.
Vecinos de las localidades más afectadas realizaron cortes de rutas en la autopista Buenos Aires-La Plata, a la altura de El Pato; en el Acceso Sudeste de Quilmes; en el Camino Negro en inmediaciones del Puente La Noria, en Lomas de Zamora; y en la avenida Fair, en Esteban Echeverría. Víctor Frites es vecino del distrito de Lomas de Zamora. “Estuvimos 15 días sin luz y muchos días, sin agua”, señaló. “A 13 días del temporal, todavía había transformadores caídos, cables tirados en la calle. Además, fue imposible comunicarse con los números de reclamos”, denunció el vecino en diálogo con FM.
Ante esta situación, algunos intendentes presentaron reclamos y denuncias ante el ENRE (el ente encargado de controlar a las empresas del sector) “Empezaremos a revisar si la falta de respuesta tras el temporal se debió por la falta de inversiones”, dijo el intendente de Ituzaingó, Alberto Descalzo, en una nota en el diario BAE.
«El temporal evidenció un estado de imprevisión, negligencia e incumplimientos inadmisibles para una empresa que tiene a su cargo la prestación de un esencial y básico servicio público», sostuvo el intendente de Florencio Varela, Julio Pereyra.
Osvaldo Bassano, presidente de la Asociación de Defensa de Usuarios y Consumidores (ADDUC) sostuvo que este temporal reveló una vez más el deficiente papel de las prestadoras de servicio. “Esto demuestra la falta de inversión de los últimos 15 años. Las demoras en resolver los problemas se deben a falta de mantenimiento, de no contar con comités de crisis, de no contar con el personal necesario”, aseguró a FM.
