Ignacio Hernaiz tiene una vasta trayectoria en políticas educativas, culturales y de derechos humanos en espacios públicos. Ha sido jefe de Gabinete de Daniel Filmus tanto en la Nación como en la Ciudad, gerente general de Educ.Ar y director del Canal Encuentro, desde donde gestó la señal infantil PakaPaka. Desde 2012, se encuentra al frente del rectorado de la UMET, Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo.
Informe Digital Metropolitano: ¿Cómo surge la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo?
Ignacio Hernaiz: La UMET es una iniciativa de la Fundación Octubre, una institución con siete años de historia. Hemos pasado por todas las instancias de acreditación universitaria de la CONEAU y del Ministerio de Educación y también obtuvimos el decreto presidencial que nos autoriza a funcionar como universidad. Durante 2012, la Presidenta otorgó cuatro autorizaciones, y una de ellas fue para la UMET. Si bien los antecedentes educativos y culturales de la Fundación Octubre y del sindicato SUTERH, que también está vinculado a la UMET, son muchos, quiero destacar el Instituto Superior Octubre (ISO) y la experiencia del Centro Cultural Caras y Caretas. Estas iniciativas, entre otras, marcan una preocupación del SUTERH con el liderazgo de Víctor Santa María, que fue quien me empujo a este proyecto.
IDM: ¿Qué tipo de articulación existe entre la Fundación Octubre y la UMET?
IE: La Fundación Octubre es la entidad propietaria de la Universidad y Víctor Santa María, como presidente de la fundación, forma parte del consejo superior. También hay representantes en el consejo académico, del cual Daniel Filmus es secretario ejecutivo y Bernardo Kliksberg, presidente.
IDM: ¿Cómo se financia la Universidad?
IE: La UMET tiene una política de inclusión muy fuerte, todo familiar directo e indirecto de los afiliados del SUTERH percibe una beca completa. Otras instituciones como ONGs y sindicatos también pueden recibir becas, al igual que los alumnos con promedios destacados, sean de colegios privados o públicos. Esas becas son financiadas por el Sindicato a través de la Fundación. Y por supuesto también se financia con las cuotas de los estudiantes no becados.
IDM: ¿Cuál se espera que sea el “perfil” del estudiante de la UMET?
IE: esperamos que sea un profesional formado en un proyecto de excelencia, que se sienta parte de una comunidad universitaria que incluye a los trabajadores y a sus hijos. También trabajamos para preparar profesionales al servicio del país, con una formación que atienda a las áreas metropolitanas, lo que conlleva una educación integral, desde materias específicas como desarrollo emprendedor hasta justicia social o integración regional a la UNASUR.
IDM: ¿Por qué el nombre de la Universidad hace referencia a lo metropolitano?
IE: creemos que va a haber una contribución a la Ciudad de Buenos Aires y al área metropolitana desde la investigación. Existen estudios e investigaciones que incorporados en la formación de los estudiantes les permitirá el día de mañana intervenir como ciudadanos protagonistas de las soluciones necesarias para que la gente viva mejor.
IDM: En las cuatro carreras que ofrece la Universidad hay un fuerte hincapié en distintas cuestiones como lo ambiental, el uso de las nuevas tecnologías, la justicia social y la articulación público-privada. ¿Por qué se elige este enfoque?
IE: Esta universidad está formada por un movimiento sindical que tiene una presencia política social y cultural muy fuerte en la Ciudad de Buenos Aires y en la Argentina. Por eso se enfoca en postulados que tienen que ver con la democracia y la justicia social. Por supuesto en la modernidad y en la excelencia académica tiene que estar la incorporación de las nuevas tecnologías. En el caso de lo ambiental es una línea de trabajo que el SUTERH siempre ha desarrollado. Si uno especificase tres problemas urgentes para formar profesionales en lo que concierne a la Ciudad de Buenos Aires y al área metropolitana, se incluiría lo ambiental, la basura y el transporte. En cuanto a la articulación público-privada, esta es una universidad privada que va a parecerse mucho a una pública, en el sentido de la inclusión y de la integración. Desde cada carrera se simula y promueve la buena articulación entre lo público y lo privado, que es imprescindible para el funcionamiento de la sociedad.
IDM: ¿Cuál es el objetivo del Departamento de Desarrollo del Emprendedor?
IE: La idea es que los alumnos puedan generar iniciativas como cooperativas. La Universidad y la Fundación Octubre van a respaldar técnica y financieramente algunas de esas iniciativas que se den en los alumnos de tercer y cuarto año. Además, vamos ocuparnos también de que haya acceso al campo laboral. Ahí si va a ser importante el aporte de especialistas de otros campos. Y también será importante que en estas iniciativas se puedan involucrar estudiantes de las diferentes carreras en un proyecto conjunto.
IDM: ¿Cómo se estructura el ciclo lectivo para los alumnos?
IE: El alumno deberá tener una dedicación diaria, de lunes a viernes, con un promedio entre cuatro y cinco horas de reloj, y en algunos casos puede haber talleres los sábados, para idiomas o para materias que requieran mayor carga horaria. La cursada se de en una banda horaria que le permita, con esfuerzo, seguir estudiando. Tenemos la voluntad, la disposición, y las condiciones para recibir a personas con capacidades diferentes. Ya están armadas las comisiones para turno mañana, turno noche y estamos cerrando las de turno tarde. Empezamos a inscribir en diciembre y tenemos, a la fecha 180 inscriptos, de los cuales 120 empezaron los talleres de integración y preparación, para ambientarse a la vida universitaria. Y seguimos inscribiendo durante todo el mes de marzo, ya que las clases empiezan el 3 de abril. Hay experiencias que indican que sobre el listado real de inscriptos, cursan aproximadamente el 10% menos. Queremos darle al alumno las herramientas para que supere el primer cuatrimestre con éxito sin ablandar la exigencia académica. El edificio de la universidad tiene capacidad para aumentar la matrícula por muchos años, con un teatro de 300 butacas y un aula magna para 120 alumnos. Estamos empezando con el edificio en un 20% de su capacidad.
IDM: Luego de haber trabajado en gestión pública en el área educativa y ser director del Canal Encuentro ¿Cuáles son los desafíos que se le presentan, a nivel personal, como rector de la UMET?
IE: Fui el responsable de la educación de la Ciudad de Buenos Aires hace más de 20 años, ocupé diversos cargos en el Ministerio de Educación Nacional, fui docente de todos los niveles y trabajé en procesos de organización institucional. Y, en este caso, se presenta un nuevo desafío, es un honor que Víctor Santa María y Daniel Filmus, entre otros, me hayan invitado a participar de este proyecto, en el que se puede seguir aprendiendo todos los días. Un rector debe garantizar que no falte nada material ni tecnológico, que las cátedras estén en la mejor condición, garantizar el funcionamiento académico, y también debe impulsar la investigación y la extensión universitaria. Lo cual es una tarea bien compleja, pero muy atractiva para cualquier educador, más si uno está pensando en un proyecto tan comprometido con el éxito y el mejoramiento de la calidad de vida de la Argentina.
Entrevista: Diego Pozzo