Por Pedro Del Piero, Presidente de la Fundación Metropolitana
Los cambios de almanaque incitan a los balances y aquí estamos, repasando algunos avances de lo metropolitano con mirada positiva pero no ingenua porque tenemos muy claro cuánto falta por recorrer para lograr una metrópolis inclusiva y con identidad, esa Gran Buenos Aires que soñamos, “Capital Latinoamericana del Conocimiento y la Diversidad”, definitivamente integrada a una Argentina pujante de regiones en crecimiento.
En este idM presentamos tres evidencias sobre la construcción de metropolitaneidad ocurridas en 2013 y que entre muchas otras nos motivan para insistir durante el año que se inicia en profundizar nuestra voluntad planificadora.
Por un lado, los intendentes. Recorriendo las siete entrevistas realizadas a lo largo del año a cuatro del sur -Jorge Ferraresi, Julio Pereyra, Gastón Arias y Mario Secco- y a tres del norte –Sergio Massa, Jorge Macri y Sandro Guzmán- podemos ratificar que los jefes comunales son el punto de partida de la cooperación interjurisdiccional. Vemos con gran satisfacción que generan oportunidades, instancias y acciones de cooperación y que en la gestión habitual de sus políticas locales promueven la perspectiva metropolitana.
Por otro lado la planificación territorial y el ambiente. Hay conciencia creciente que el trato que el hombre le dió al suelo, a la ocupación del territorio y a sus cuencas, fue, cuanto menos, imprudente. Las inundaciones marcan una evidencia dura y dolorosa. Este es un tema central en relación con la calidad de vida de los metro bonaerenses y su seguridad, que impone un planeamiento de recuperación frente a la antropización antinatural y el urgente cuidado del territorio todavía ambientalmente apto, poco o nada agredido. Puntualmente es el caso de los humedales y del Delta del Paraná, donde nuestra Fundación colaboró activamente en la sanción del Plan de Manejo del Delta de Tigre por su Concejo Deliberante, su Código de Zonificación y la Normativa de Construcciones; a ello sumamos dos talleres realizados conjuntamente con la Fundación Humedales/Wetlands International destinados a consolidar el desarrollo sustentable de los humedales. No dudamos que estas acciones forman parte de un proceso de construcción de criterios para intervenir en el territorio, donde destacamos con satisfacción la sanción del Senado de la Nación de la Ley de Presupuestos Mínimos para la conservación, protección y uso racional y sostenible de los Humedales en todo el país.
Finalmente completamos con una nota reseñando la Jornada que realizamos sobre la “Idea-proyecto Metrobus Metropolitano,una opción para bajarse del auto”, iniciativa que nuestra Fundación viene proponiendo hace varios años, hoy fuertemente dinamizada por el Metrobus 9 de Julio de la CABA y en el marco de valoración lograda por la modalidad Metrobus. Se trata de integrar el transporte público sobre las grandes autopistas de acceso a la CABA para mejorar las condiciones de los flujos metropolitanos de las mismas, hoy congestionadas por el uso del automóvil. Imaginamos un servicio por carriles exclusivos, con pocas paradas, pagando al ingresar a dársena, brindado por unidades grandes, generando importantes centros de trasbordo y completando la movilidad con el ordenamiento de las líneas existentes ya sean locales o pasantes. Destacamos que este aporte –netamente metropolitano- se suma a los numerosos “Metrobuses” en carpeta, tanto en la CABA como en el GBA, como es el caso del Metrobus en Ruta 3 impulsado por la Agencia Metropolitana de Transporte.
Paso a paso y gota a gota la gobernabilidad de la Metrópolis Buenos Aires avanza. Como dijimos al comienzo vemos una vez más la necesidad de planificar estratégicamente porque el corto plazo no existe en las políticas metropolitanas. Se debe gestionar con visión de mediano y largo, considerando la complejidad y la escala, y se debe promover confluencia de voluntades decisionales de variadas jurisdicciones. Para ello es urgente diseñar un dispositivo capaz de ejecutar una metodología de planeamiento estratégico participativo. Sobre ello insistiremos en este 2014 sometiendo a debate nuestra vieja idea de contar con una Agencia Metropolitana de Planeamiento capaz de administrar agenda, intereses y saberes aplicados al mejor andar de La Gran Buenos Aires.