El Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (GCBA) presentó el Plan de Movilidad Sustentable 2030, un documento que se propone generar un marco de orientación de la acción pública y privada. Desde el 2018, y con el impulso de la Secretaría de Transporte y Obras Públicas, se vienen desarrollando mesas de trabajo que analizan y discuten los objetivos comunes entre actores propios y externos al GCBA con el fin de generar una visión unificada sobre las problemáticas generales que envuelven a cada tema. A lo largo de estos 5 años se definieron objetivos generales y específicos, se recabó información específica para detallar el estado de situación actual, se identificaron actores relevantes y se construyeron indicadores. A continuación, se describen y analizan los puntos que hacen al estado actual de la ciudad y al plan que se formuló desde el gobierno.
Pilares fundamentales
Orientar la planificación hacia una acción que dé una movilidad sustentable se pensó como una tarea pensada sobre 5 pilares fundamentales:
- Movilidad sustentable: Corresponde una responsabilidad con el cuidado ambiental y las personas que habitan este suelo. En sintonía con el compromiso asumido por la ciudad para lograr la neutralidad de carbono en 2050, es natural impulsar el uso de transporte público y modos activos.
- Movilidad accesible: Generar un acceso equitativo a todos los bienes y servicios urbanos, de forma tal que desplazarse por la ciudad sea un ejercicio eficaz y seguro, atendiendo las diferentes particularidades que motivan la movilidad de cada una de las personas.
- Movilidad metropolitana: El plan actúa localmente, pero piensa de forma global. Se busca la integración de la ciudad con una región que funciona como metrópolis. Mediante una acción transversal que encuentra dificultades en la gobernanza, se plantea avanzar sobre lineamientos fundamentales en materia de movilidad y de planificación territorial.
- Movilidad segura: Se busca integrar la concepción de seguridad a la planificación para concretar una movilidad que sea inclusiva y segura. El trabajo sobre la seguridad vial permite la pacificación del tránsito y la transformación de la calle.
- Movilidad personalizada: Se plantea hacer uso de la tecnología aplicada a las diferentes necesidades, con el fin de especificar los objetivos y llegar de forma precisa a todos los ciudadanos. Se busca hacer un uso eficiente de los espacios y la información.
La población
La Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) tiene una población de 3.120.612 habitantes, lo que representa el 7% de la población de Argentina y de los cuales el 53% son mujeres. Tiene una densidad de población de 15 mil habitantes por km2, en su gran mayoría concentrada en el macrocentro, el corredor norte y los barrios populares, en los cuales, reconoce el GCBA, se vive en condiciones de hacinamiento crítico. El 55,2% de la población porteña que posee estudios de nivel superior reside en la zona norte de la ciudad, el 37,4% en el centro, y el 20% en zona sur. Aquí se encuentra una relación directa en cuanto a la tasa de desocupación, ya que el 5,3% de los desocupados habita zona norte, el 7,5% el centro, y el 11,2% la zona sur. En cuanto al punto etario, entre 2010 y 2020 la población sub 35 pasó del 57% al 54%. Para tomar noción de la situación porteña, el plan aclara que se considera una sociedad “envejecida” cuando más de 7% de la misma posee 65 años y más. Aquí, esta franja representaba el 15,5% en 2010 y 16,4% en 2020.
En cuanto a la población del AMBA, sus 14 millones de habitantes representan el 32% del país (censo 2010), siendo la segunda área metropolitana más grande de Sudamérica (después de Sao Paulo). Es la región socioeconómica más grande de la Argentina, ya que concentra más del 40% del Producto Bruto Interno y del Producto Bruto Industrial en menos del 1% de la superficie territorial del país. Por estos motivos, no puede pensarse un Plan de movilidad que identifique desafíos, problemas y oportunidades de forma aislada de la región en la cual se encuentra CABA.
Espacio público
Del total de los 203 km2 de la ciudad, el 28% está destinado a las veredas, el 47% a las calzadas y el 25% a los espacios verdes. Al respecto del espacio público, el plan aclara que “…se debe tener en cuenta que es un bien limitado y no puede aumentar su superficie salvo escasas excepciones.”. Si se analiza el uso de las calzadas, el 64% de ellas está destinado a la circulación, del cual el 6% es de uso exclusivo (metrobús, ciclovía, carriles exclusivos); mientras que el 36% restante tiene otros usos sin fines de circulación. Por ejemplo, el 44% está destinado al estacionamiento de vehículos particulares.
Estructura de la movilidad
Se estima que todos los días ingresan 1,4 millones de personas a CABA. En la ciudad se realizan más de 8 millones de viajes diarios, de los cuales el 60,5% son internos y el 39,5% interjurisdiccionales (85% a CABA y 15% al AMBA). El análisis detallado de los viajes que se realizan dentro de los límites geográficos porteños arroja que el 46,7% se da en transporte público, el 20,7% en transporte motorizado individual, el 26,1% son caminatas, el 3,6% bicicletas y el 2,2% son viajes en transportes motorizados compartidos. En cuanto a las causas de los traslados, el plan detalla lo siguiente:
Si se estudian los medios de transporte según el género, entre los datos más fuertes resalta que 7 de cada 10 conductores que utilizan el automóvil son varones, mientras que 6 de cada 10 caminantes son mujeres. El 58% de los ciclistas son varones, misma cifra de las mujeres que viajan en transporte público. Finalmente, el 57% de los auto acompañantes son del género femenino.
El plan hace fuerte énfasis en la región geográfica en la que se encuentra, no toma a la ciudad como un sujeto desconectado de la provincia de Buenos Aires, por lo cual arroja las siguientes estadísticas de los viajes en el AMBA:
Subtes
La Ciudad tiene 57 kilómetros de subte con 90 estaciones, 1 línea de tranvía, un premetro de 7,6 kilómetros y 18 estaciones que alimentan una de las líneas del subte. Entre los logros de gestión, el GCBA destaca las prolongaciones de las líneas A, B, H y E que ampliaron las conexiones entre sí. “…Particularmente, se desarrollaron las ampliaciones de la línea H y sus conexiones con las líneas B y D, y la extensión de la línea E conectando con la B, y una segunda conexión con la C en Retiro.”
El 52% de los porteños se encuentra a menos de 800 metros de una estación de subte, medio de transporte que le da acceso al 67% de los puestos de empleo del sector privado y público, y al 75% de la matrícula educativa de nivel superior, y al 55% del nivel medio. Entre las motivaciones para usar subte, el 60% lo usa por trabajo, el 15% porque son estudiantes del nivel superior, el 6% por salud y el 2% por el nivel educativo medio. A su vez, el 28% de los usuarios de subte son bonaerenses.
El GCBA señala que en el 2011 el 0% de los vagones contaba con climatización, y que para el 2019 el 71% pasó a contar con este beneficio. El plan explica que históricamente, las inversiones dirigidas al subte se orientaban a la extensión de la red y no a la actualización o mejora de la red existente o del material rodante, lo cual ocasionó que el sistema fuera perdiendo seguridad y confiabilidad. Aquí, luego del traspaso del servicio desde Nación a la Ciudad en 2013, “…se reorientaron las inversiones hacia la modernización de gran cantidad de componentes electromecánicos y señalamiento, la realización de intervenciones en las estaciones, la renovación y ampliación de la flota, lo que permitió mejorar significativamente las frecuencias, pasando de un intervalo medio de 5 minutos en 2011 a uno de 3,5 minutos en 2019.”
Entre las principales dificultades para adecuar el sistema a los nuevos parámetros de accesibilidad acordes al siglo XXI, el Plan señala que la infraestructura es bajo el suelo, que gran parte de las estaciones tienen protección patrimonial, que en muchas de ellas hay un gran entorno urbano consolidado y que toda la estructura está conforme a paradigmas que tienen más de 100 años.
Dentro de los causantes de los gases de efecto invernadero que se producen en la CABA, el 52% es responsabilidad de la producción energética, el 17% es fruto de los residuos contaminantes y el 31% consecuencia de los transportes, del cual el 50% lo producen automóviles, el 23,2% vehículos de carga, 14,3% utilitarios, 7,1% colectivos, 3,6% ferrocarriles y 1,8% motos.
En cuanto a la contaminación sonora, la ley 1.540 establece que la presión sonora admitida de día es de 80 decibelios, mientras que 75 son los aceptables para la noche. El plan detalla que estos límites se superan ampliamente en vías con importante circulación. Si bien el punto más crítico es la zona central, el ruido se expande más allá.
A la hora de analizar la seguridad vial, se encuentra que el 57% de las causas de los accidentes reside en un exceso de velocidad, un 32% por pasar semáforos en rojo, y un 27% por consumo de alcohol y/o estupefacientes. Entre las víctimas fatales según tipo de usuario, el plan detalla el siguiente gráfico:
Los objetivos que se plantea el Plan proyectan una recomposición de la repartición modal de la siguiente manera:
Así como se plantearon pilares para analizar el diagnóstico actual, se detallaron estrategias que permitirán identificar objetivos y líneas de acción para alcanzar las metas planteadas en el cuadro anterior. Estas estrategias son:
- Hacer más atractivo al transporte público (TP): Busca absorber los viajes de modos privados motorizados y atenuar los efectos negativos del transporte público. Se propone expandir el espacio de la red de Metrobus y carriles exclusivos, reestructurar las grillas horarias en el transporte público y aumentar la capacidad de las formaciones de los FFCC. Mejorar la inclusión del transporte público. Promocionar una planificación territorial del AMBA estructurada en torno al transporte público masivo, incorporar servicios cortos para fortalecer el uso de la red ferroviaria y unificar una agenda de trabajo sobre transporte público. Hacer más segura la experiencia del TP. Ofrecer herramientas y servicios que permitan a los usuarios una planificación personalizada del trayecto y un mejor uso del tiempo en el TP.
- Potenciar la intermodalidad:El plan tiene como objetivo priorizar los modos eficientes en los nodos intermodales, mejorar la gestión del estacionamiento, integrar a las combis y taxis, equipar a todos los nodos con estaciones de bicis e integrar la reserva de espacios para el ascenso y descenso de particulares en los nodos. Facilitar el intercambio modal para todas las personas a través de la infraestructura, la información, las tarifas y la tecnología. Abordar la red intermodal de transporte en su contexto metropolitano, establecer grillas intermodales coordinadas e impulsar el transporte fluvial de pasajeros CABA-GBA. Abordar el diseño físico de los nodos intermodales para mejorar la seguridad vial y ciudadana. Ofrecer herramientas que favorezcan la complementariedad entre servicios y orientar las decisiones hacia las soluciones más eficientes.
- Desarrollar los modos activos: Establecer los viajes no motorizados como componente primario de la movilidad, expandir el sistema de Ecobici, establecer una red estructurante de movilidad peatonal a escala de la ciudad. Mejorar la accesibilidad de las personas y lugares independientemente de los modos motorizados, reforzar la red de ciclovías existente y fomentar trayectos de cercanía en modos activos (escuelas, centros barriales, etc). Mejorar la conexión de la Ciudad con los municipios vecinos a través de modos activos y expandir la red de ciclovías al AMBA. Mejorar las condiciones de seguridad vial para los actores más vulnerables de la movilidad. Disponer de información y de servicios adecuados integrados al sistema de movilidad.
- Compartir la calle: Equilibrar los usos del espacio vial, privilegiando los usos eficientes, impulsar la reconversión de la infraestructura vial estructurante, establecer programas barriales de redistribución del espacio entre calzada y acera, establecer instrumentos de comunicación para concientizar sobre el impacto ambiental. Hacer más equitativo el acceso equitativo al espacio público. Establecer una Ley de diseño accesible del espacio público. Ordenar y estabilizar la participación modal del auto en viajes GBA-CABA, expandir sistemas de Autopistas inteligentes, mejorar el factor de ocupación de los vehículos personales, impulsar el estacionamiento disuasorio en estaciones de la tercera corona y mejorar el monitoreo de la circulación. Integrar la seguridad para todos sus usuarios desde la concepción hasta la operación de las calles y otras vías de circulación. Impulsar una gestión abierta y compartida de los usos de la calle, anticipando nuevas demandas.
- Organizar la logística: Por último, pero no menos importante, el plan busca priorizar las formas eficientes y responsables de abastecimiento, establecer una mesa periódica de actores públicos y privados de la logística, fomentar el uso de vehículos pequeños y generar microplataformas de distribución de proximidad. Impulsar el acceso ordenado y seguro a bienes de consumo a todos los barrios, mejorar la organización de la carga y la descarga de Polígonos Comerciales y facilitar las entregas a los barrios con menor acceso a bienes. Ordenar las cadenas de logística, multi e intra modal. Fomentar nuevos centros de ruptura de cargas en el AMBA y reservar espacios para operaciones en sus distintas escalas. Reducir la incidencia de transporte de cargas y de los servicios de mensajería o reparto en la siniestralidad vial, establecer cupo mínimo para impulsar la representación femenina y de otras identidades de género en el sector logístico. Orientar a los actores del sector y a los usuarios hacia decisiones más eficientes, establecer horarios de carga y descarga según características urbanas, establecer espacios flexibles para la logística en barrios densos, e impulsar tecnología para agilizar la carga y descarga.